Cristina Fernández denunció que encontraron sustancias tóxicas en su departamento del barrio de Recoleta luego del allanamiento realizado la semana pasada. La exmandataria publicó un comunicado escrito por su letrado, Carlos Beraldi, en sus redes sociales en el que enumera distintas acciones que considera «irregulares», no solo en dicho procedimiento, sino tambien en los realizados en la provincia de Santa Cruz.

Beraldi reiteró que no lo dejaron participar ni presenciar los trabajos que realizaron los peritos en la vivienda de Uruguay y Juncar y que ya inició los reclamos correspondientes en la justicia y en el Senado nacional. Además advirtió que dos días después de dicho allanamiento y «Una vez en el interior del departamento, sintieron mareos, fuerte picazón en la garganta y los ojos y dificultades para respirar. Como tales síntomas persistieron durante el resto del día, el domingo 26 de agosto próximo pasado concurrieron a la guardia del Hospital de Clínicas. Luego de efectuarse los controles médicos de rigor, se constató que las dolencias padecidas tienen como origen un tóxico de contacto, recomendándose evitar, por todos los medios, una nueva re exposición al mismo ambiente. Por esa razón mi representada decidió no regresar a ese departamento hasta tanto no se tenga una certera evaluación sobre el lugar y las cosas que fueron objeto de manipulación durante el allanamiento».

«Sintieron mareos, fuerte picazón en la garganta y los ojos y dificultades para respirar
y se constató que las dolencias padecidas tienen como
origen un tóxico de contacto», explicó Beraldi.

Además explica que, en el caso del operativo realizado en la estancia de El Calafate, el mismo «fue extendido en el tiempo de manera ilegal y deliberada con el inequívoco propósito de seguir generando estrépito y material para las tapas de diario del fin de semana», así como también la filtración de «datos absolutamente falsos: en ninguno de  los domicilios hay bóvedas ni documentos u objetos que puedan tener una procedencia ilícita«.

El abogado alertó que «no se está preservando la cadena de custodia de las cosas que están siendo requisadas durante el allanamiento» y que «durante toda la noche no sabemos quien entra o sale de la casa y, mucho menos, si se planta cualquier tipo de prueba falsa«.

Por último, Beraldi insistió en que «este nuevo capítulo, que se suma a la saga de dos años y medio de hostigamientos y persecuciones hacia la Dra. Fernández de Kirchner, en las que ni siquiera se han privado de escuchar y difundir sus conversaciones privada».