Unos 400 trabajadores del complejo de decoración Buenos Aires Design, en el barrio porteño de Recoleta, cortaron hoy durante una hora y media un carril de la avenida Libertador, en el cruce con la avenida Pueyrredón, para reclamar por 1.500 puestos que corren el riesgo de desaparecer con el cierre del predio.
Buenos Aires Design, emblemático centro comercial del barrio de Recoleta apuntado a la decoración y el diseño, cerrará este domingo sus puertas porque ese día finaliza la concesión a cargo de la firma IRSA. El predio funciona desde 1993, cuenta con, al menos 70 locales y en ese camino, por lo menos 700 trabajadores perderán su empleo.
El espacio retornará al Ejectuvo porteño, comandado por Horacio Rodríguez Larreta. Lo hará pese a las intenciones de los titulares de IRSA de ampliar el contrato. Lo cierto es que las negociaciones no resultaron exitosas. «Pensábamos que la negociación estaba avanzando porque teníamos la intención de continuar con la explotación», indicaron desde la empresa en diálogo con el diario La Nación.
Desde el Ejecutivo Porteño afirmaron que,
tanto la empresa como los trabajadores,
estaban al tanto de la situación.
Además, los ejecutivos de la empresa agregaron que «nos parecía oportuno hacer un cierre ordenado para preservar las 700 fuentes de trabajo». Pese a sus intenciones, las fuentes consultadas por el matutino revelaron que el último viernes, desde el Gobierno, «nos informaron que debíamos retirarnos».
Empleados que trabajan en restaurantes, bares y en locales de venta de productos de decoración del centro comercial salieron a las 8.30 con bombos y platillos en una ruidosa protesta que contó con el respaldo de algunos automovilistas, en la que pidieron que los dejen quedarse hasta que se realice la nueva concesión.
La protesta con el fin de reclamar por sus puestos de trabajo fue en la intersección de las avenidas Pueyrredón y Del Libertador. Sin embargo, desde el Ejecutivo porteño señalaron que el cierre del shopping «no es algo que cayó de sorpresa». «Sabían que el 18 de noviembre de 2018 se tenían que ir», se enfatizó.
Mientras tanto, aún se desconoce el futuro para el predio. Sin embargo, la administración de Rodríguez Larreta se encuentra trabajando con la mira puesta en una nueva concesión. La misma se hará en el marco de una ley que establece que tendrá que ser por 20 años. Y, tal como hasta ahora, la futura y aún desconocida empresa que ocupe el edificio deberá estar orientada a la cultura así como al rubro gastronómico.