La falta de insumos, las deficiencias edilicias, la escasez de personal, los bajos salarios y la creciente inseguridad para ejercer sus funciones son algunos de los reclamos que hicieron visibles el jueves los trabajadores de salud del hospital provincial Rossi de La Plata con un abrazo simbólico al histórico edificio.
A la protesta llevada a cabo en el predio hospitalario de 37 y 117 convocada por los gremios Cicop y Ate se sumaron profesionales de prácticamente todas las áreas del Rossi como también de otros hospitales regionales y personal administrativo, camilleros y de limpieza.
Bajo la consigna “La tragedia de Moreno se puede repetir cualquier día”, los manifestantes también reclamaron una convocatoria a paritaria «con una propuesta salarial digna ante la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores».
La situación llegó a un límite “insostenible”, sostienen desde Cicop, principalmente luego de que el pasado domingo se incendiara un aire acondicionado en el Servicio de Costura que “pudo extinguirse gracias al único matafuego que se encontraba en condiciones y a la fortuita reacción de los trabajadores del lavadero”.
Vale recordar que hace tres semanas atrás se prendió fuego otro aire acondicionado en el Servicio de Rayos que mantiene las prestaciones de Rayos X y ecografía, que hasta el día de hoy se encuentran suspendidas y sin fecha de reapertura.
Desde el gremio de la salud advierten además que denunciarán en el abrazo las condiciones laborales en las que trabajan y el deterioro del sistema público de la salud en toda la Provincia de Buenos Aires: “Hay muchos problemas para garantizar la adecuada atención de nuestros pacientes”. En este sentido, denunciaron que no funciona el tomógrafo desde hace meses y el “entorpecimiento por parte del Ministerio de Salud en los pedidos de insumos y prótesis”.